La robotización sigue siendo un tema crucial en la era actual. A medida que las industrias van evolucionando, la tecnología empleada para aumentar la productividad y la eficiencia también avanza.
De hecho, la robotización y la automatización transformarán una amplia variedad de sectores en las próximas décadas, incluyendo, el sector máquina-herramienta, el packaging, la automoción, el médico, la agricultura, la construcción y el transporte, entre otros.
Según McKinsey, una de las consultoras más importantes del mundo, se espera que el número de robots industriales en todo el mundo se duplique para el año 2025, alcanzando un total de alrededor de 20 millones de unidades.
Queremos que tú también seas partícipe de este cambio. Por ese motivo, en Daneel Mechatronics, te ofrecemos la posibilidad de desarrollar aplicaciones robotizadas para cualquier tipo de industria y sector, utilizando tanto robótica colaborativa como robótica industrial.
¿Quieres saber en qué se basa la robotización y a qué tipos de aplicaciones se pueden implementar? Te lo contamos en este artículo.
Índice
Podemos definir la robotización como la acción de automatización de tareas o procesos mediante el uso de máquinas programables llamadas robots, capaces de realizar tareas de forma autónoma o semiautónoma. Los robots pueden ser programados para realizar una variedad de tareas, desde tareas simples y repetitivas hasta tareas más complejas y especializadas.
Entre las ventajas de la robotización encontramos la mejora de la eficiencia y la productividad, reducción de los costes de mano de obra y mejorar la calidad y la precisión de los productos y servicios.
Las células robotizadas son sistemas complejos que consisten en varios robots y/o máquinas que trabajan juntos para llevar a cabo tareas específicas. Estas células tienen una amplia gama de aplicaciones en diferentes industrias y sectores.
Normalmente las células robotizadas disponen de una o varias estaciones de trabajo, en las que por un lado el robot mantiene su actividad y por el otro una persona carga o descarga las piezas a manipular o supervisa la acción realizada por el robot.
En algunas ocasiones el operario puede ser también reemplazado por otro robot que realiza dichas tareas de manipulación o supervisión.
En la industria existen infinidad de procesos que se pueden realizar con células robotizadas. A continuación explicaremos algunos ejemplos.
Las células de fresado, son células que cuentan con dos robots industriales de tamaño mediano (ABB 4600), los cuales están equipados con cabezales de fresado que permiten la realización de geometrías 3D. Estas células se utilizan comúnmente en empresas auxiliares del sector del automóvil.
Las fresadoras pueden ser neumáticas o eléctricas, dependiendo de la velocidad y del tipo de material que se esté utilizando.
Algunos ejemplos de aplicaciones en la industria son el fresado de portones de SMC, el fresado de salpicaderos de coches, y el fresado de parachoques, entre otros.
Las células de corte por agua son sistemas automatizados que utilizan un chorro de agua a alta presión para cortar materiales. En estas células, el chorro de agua se dirige a través de una boquilla de alta presión y se enfoca en un punto muy pequeño, generando una fuerza de corte suficiente para cortar materiales duros como el metal o el vidrio.
Por lo general, estas células constan de dos o tres robots de tamaño pequeño (ABB 2600) y trabajan a una presión de 3600 bares.
Las células de corte por agua suelen estar equipadas con un sistema de control numérico computarizado (CNC), que permite programar con precisión el movimiento del chorro de agua a lo largo de la pieza de trabajo. Esto significa que se pueden realizar cortes precisos y repetitivos en una variedad de formas y tamaños de piezas.
Las células de eliminación de rebabas o imperfecciones superficiales son sistemas sencillos que suelen contar con robots de tamaño pequeño o mediano (ABB 2600, ABB 4600) o robots colaborativos. La robótica colaborativa es especialmente útil para este proceso, ya que utiliza el control de par del robot para mejorar el resultado final del lijado.
Estas células son comúnmente utilizadas en la eliminación de rebabas o imperfecciones en piezas de trabajo, tales como piezas metálicas o de plástico en la industria automotriz o electrónica. El proceso implica el uso de herramientas de lijado, tales como discos de lijado o cintas abrasivas, que son montadas en la herramienta del robot.
Las células de atornillado son sistemas automatizados en los que un robot se encarga de atornillar diferentes piezas entre sí. Normalmente se utilizan robots de tamaño mediano (ABB 2600, ABB 4600) o robots colaborativos en estas células. Los atornilladores pueden ser eléctricos o neumáticos, y el suministro de tornillos puede ser automático o manual.
Una de las principales ventajas de las células de atornillado es que permiten atornillar tornillos en cualquier posición, lo que facilita el ensamblaje de piezas en lugares de difícil acceso. Además, estos sistemas también permiten controlar el proceso de atornillado, incluyendo el par de apriete, la profundidad y el número de vueltas.
Algunos ejemplos de piezas que pueden ser ensambladas en una célula de atornillado incluyen ventiladores, radiadores y tarjetas de electrónica.
Las células de soldadura son aquellas que posibilitan la unión de dos materiales plásticos mediante su fusión. En el cabezal del robot, se instala el sonotrodo, que tiene la responsabilidad de llevar a cabo la soldadura. Para ello, el sonotrodo se coloca sobre el material a soldar y lo funde mediante ultrasonidos. 
Existen varias formas de soldadura estándar, incluyendo aquellas que utilizan pines o lengüetas con diferentes geometrías.
Las células de manipulado tienen una amplia variedad de aplicaciones, desde la manipulación de piezas grandes, como parachoques, portones y tubos, hasta piezas más pequeñas como abridores, bandejas alimentarias y muelles. En estas células, el robot se encarga de manipular la pieza para realizar diferentes procesos, siendo la carga y descarga de prensas o inyectoras una tarea muy común. Por lo general, se utilizan robots grandes como el ABB 7600 y ABB 8600.
Además de la carga y descarga, estas células permiten la realización de otras acciones secundarias como el corte de colada, el marcado láser y el flameado. Otra aplicación habitual es el ensamblado de pequeñas piezas o el manipulado de las mismas para su uso en otros procesos.
Existen innumerables soluciones de células robotizadas disponibles para satisfacer cualquier necesidad productiva que puedas tener.
En Daneel Mechatronics, como empresa joven pero con un equipo de más de 30 años de experiencia en la automatización de procesos, estamos preparados para proponerte la solución más adecuada. Cuéntanos qué necesitas automatizar y te ofreceremos la mejor opción para ti.
Si todavía te surgen dudas al respecto, contacta con nuestro equipo de especialistas en robotización y mecatrónica. Estaremos encantados de ayudarte.
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